lunes, 16 de septiembre de 2013

'Hay que poner a trabajar juntas a la economía y a la ecología'

Así se resume el mensaje de Satish Kumar, peregrino, pensador y activista
La compasión y la interdependencia son los dos pilares de sus enseñanzas
Achaca la crisis a la visión reduccionista de la economía
Asegura que 'el cambio real lo va a traer la gente
 
Satish Kumar aboga por un profundo giro en la noción de Economía. | C. F.
 
La Economía es de Marte y la ecología es de Venus. Y va siendo hora de que las dos ciencias, peleadas hasta ahora, se pongan a trabajar juntas por todo lo que está en juego aquí en la Tierra.
Así podríamos resumir el último mensaje de Satish Kumar, peregrino y pensador, educador, activista y tantos otros oficios que sigue inventando sobre la marcha, con tal de que no le llamen "sabio" (su humildad se lo impide). Condensar en pocos párrafos sus 77 años es tan difícil como encontrar una palabra que le defina de sus infatigables pies a su eterna sonrisa...
Pongamos que Kumar nació hace 77 años en Rayastán (India). De adolescente fue monje jainista, y a los 18 se convirtió en apóstol de la "no violencia". En 1962 recorrió sin dinero y a pie los 12.000 kilómetros que separan la tumba de Gandhi a la de JFK, invitando a un "té de la paz" a los líderes de las potencias nucleares.

"Las dos palabras tienen la misma raíz en griego: 'oikos', casa. La casa, en este caso, es el planeta. Y está claro que necesitamos conocerlo a fondo...".
     En Gran Bretaña conoció a E.F. Schumacher, el autor de 'Lo pequeño es hermoso', que le convenció para echara raíces en las colinas de Devon. Allí sigue al cabo de cuatro décadas, convertido en "alma" del Schumacher College (la escuela internacional de educación holítica) y dirigiendo al mismo tiempo Resurence/The Ecologist, la revista donde se dan la mano visión más espiritual y la más reivindicativa de la ecología.
     Autor de libros como 'Peregrino en la Tierra' o 'Tú eres luego yo soy', ha convertido la compasión y la interdependencia en los dos pilares de sus enseñanzas, que en los últimos años, desde que arrancó la crisis, han derivado hacia la necesidad de tender puentes entre la Economía y la Ecología. Por ahí arrancamos...

Empezar la casa por el tejado

     "Conviene recordar que las dos palabras tienen la misma raíz en griego: "oikos", que significa casa. La casa, en este caso, es el planeta. Y está claro que necesitamos conocerlo a fondo... De ahí viene Eco-logía, de "logos", conocimiento. Eco-nomía viene de "nomos", que significa "gestión". Luego las dos están indisolublemente unidas".
     El problema, según Kumar, es que durante siglos hemos querido empezar la casa por el tejado... "La economía, reducida al mundo de las finanzas y el capital, lo ha terminado dominando todo. Y ése ha sido el gran error: ¿Cómo queremos gestionar una casa si antes no la conocemos? O lo que es lo mismo: ¿Cómo puede funcionar la Economía si se deja de lado la Ecología?".
    Sostiene Kumar que la causa de la crisis es precisamente esa visión reduccionista de la economía en la que todo se reduce a dinero, dinero y más dinero... "En la economía clásica se ha hablado siempre de los tres elementos: tierra, trabajo y capital. La tierra es la materia prima, los recursos naturales. El trabajo es el factor humano, tantas veces olvidado. Y el capital, ya lo vemos: se ha acabado apoderando del sistema, como si los otros elementos no existieran".
   Todo lo intentado desde el 2008 no son más que "intentos de solucionar el problema con la misma mentalidad con la que se ha creado". En opinión de Kumar, "la economía está en manos de gente que desconoce realmente lo que está gestionando, y por eso estamos en este lío".

Deseo de cambio

      La solución pasa a su entender por un profundo giro en la noción de Economía, que tiene que ser "subsidiaria" de la Ecología: "No se puede gestionar una cosa sin antes conocerla, y perdón por la insistencia... Hace poco me invitaron a una conferencia en la LSE y les propuse que se rebautizaran como London School of Ecology and Economics. Creo que será simplemente una cuestión de tiempo. Muchas universidades van ya por ese camino y se han creado campos interdisciplinares como la economía ecológica y la bioeconomía".
"La riqueza real está en la tierra y en los bosques, en las manos y en las comunidades humanas"
     "Sinceramente, creo que no hay otro camino", asegura Kumar. "La riqueza real está en la tierra y en los bosques, en las manos y en las comunidades humanas. Esta crisis es la bancarrota de un sistema que se ha basado únicamente en el capital y en la especulación. Esta crisis está haciendo mucho daño a la gente menos favorecida, pero debe servir también para hacernos despertar".
     "Aunque los políticos y los economistas son prisioneros del sistema, no nos engañemos", advierte el pensador indio. "Los cambios reales no van a venir de arriba. Por mucho que celebráramos en su día la llegada del primer presidente negro en EEUU, no podemos olvidar que Obama sigue siendo un prisionero de Wall Street, de los "lobbies", del Senado, de los grandes medios...".
     "El cambio real lo va a traer la gente, y ya hemos visto los primeros brotes con los "indignados" o con el movimiento "Occupy". Pero sigue sin haber un movimiento de masas, y lo cierto es que vamos a necesitar una gran presión sobre los gobiernos. La gente tiene la sensación de haber perdido el control de sus vidas, y por ahí hay que empezar: con la relocalización de la economía, con la creación de cooperativas, con un nuevo modelo de educación que empodere a los jóvenes".
    La educación es por cierto otra de las prioridades de Satish Kumar, que pronto dará nombre a una escuela en Mallorca (en donde participará el 5 y 6 de octubre en la novena "trobada" de Tierra, Alma y Sociedad). En 1982, Kumar creó la "Small School", una escuela primaria y secundaria donde la ecología se da la mano con la economía, la ciencia dialoga con la espiritualidad y la política se convierte en el pan de cada día.
   "Vuelvo a Mallorca como peregrino, con gran humildad y curiosidad", advierte Kumar. "Siempre aprendo algo nuevo allí. Y a pesar de la situación es España, a pesar del 50% de paro juvenil, he encontrado un gran entusiasmo y un deseo profundo de cambio. A los jóvenes sin trabajo siempre les digo: no conformaros con buscar un empleo o siempre seréis unos "empleados". Cread vuestro propio oficio, transformaos en "eco-emprendedores" por un mundo mejor, que es lo que realmente le hace falta a la economía y al planeta".
 

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