Multimedallista en competiciones árabes e internacionales, Khamis Zaqqout, atleta palestino refugiado en Gaza, se ha convertido en una fuente de inspiración para los jóvenes de Palestina, tras participar en los Juegos Paralímpicos de Londres.
Khamis abandonó sus estudios para trabajar cuando su padre y su hermano mayor fallecieron. Encontró un empleo en Israel, en la construcción, antes de que los bloqueos del país limitasen las oportunidades de trabajo para los gazatíes.
Su vida dio un vuelvo cuando, en 1992, un accidente le dejó parapléjico. Sin opciones de trabajo, la Agencia de la ONU para los refugiados de Palestina (unrwa) y los servicios sociales les proporcionaron ayuda a él y a su familia. Tras varios años recuperándose, aprendió a moverse de nuevo en un centro de rehabilitación de Ramal (Cisjordania).
Estableciendo nuevos récords
Sin embargo, no se desanimó. En lugar de ello, trabajó para llegar a la élite deportiva. Tras probar con el baloncesto y la natación, optó por el atletismo. Entrenó durante 20 años y participó en gran cantidad de torneos internacionales que le dieron una plaza para los Juegos Paralímpicos de Londres 2012 en Doha (Qatar), donde estableció un nuevo récord asiático en lanzamiento de peso, a una distancia de 11,40 metros.
"No gozamos de los derechos fundamentales de cualquier atleta", se lamentó Zaqout, tras la prohibición que le impusieron las autoridades israelíes para viajar a Jerusalén y a Ramal. Allí se celebraba una ceremonia festiva organizada por el Reino Unido con motivo de los Juegos Paralímpicos.
El sueño de Khamis, como el de muchos deportistas, era representar a su país, a Gaza, en competiciones internacionales de alto nivel. Un sueño que parecía imposible ante la falta de instalaciones y material deportivo en los campos de refugiados de la franja de Gaza, pero que consiguió realizar a los 47 años.
Khamis compitió en tres categorías en los Juegos de Londres: lanzamiento de peso, disco y jabalina. Y, aunque no se ha llevado ninguna medalla, ha inspirado a todos los palestinos. "Somos seres humanos y desde nuestros humildes comienzos cambiamos el concepto de Palestina y del deporte para discapacitados. Ese es mi propósito y mi mensaje. No hay nada imposible", dice el atleta.
Fuente: http://www.elmundo.es/elmundo/2012/09/19/solidaridad/1348041913.html
No hay comentarios:
Publicar un comentario